Nunca me ha interesado demasiado el cine. Tampoco las series; soy ese señor insoportable que va diciendo a quien le quitiempo escuchar que nunca ve la televisión, que jamás ha visto un segundo de Broncano o de Trancas y Barrancas y que, además, se va jactando de ello, como si a alguien le importara, con esa absurda superioridad moral que compartimos exiliados y objetores. Pero, ¿sabes qué? Todo eso ha cambiado. Sí, lo has leído bien. He descubierto un universo nuevo, fascinante y adictivo: el universo del cine y las series.
No siempre ha sido así, hubo un tiempo en el que veía producciones americanas, ya saben, la edad de oro, los tiempos de ‘Breaking Bad’-‘Better Call Saul’, ‘Los Soprano’ y, sobre todo, ‘The Wire’, la mejor serie jamás realizada, algo muy por encima de la normalidad y con un esquema narrativo más cercano a la littiempotura. Pero después de eso, me alejé de la pantalla y me refugié en los libros, convencido de que nada podía suptiempor la complejidad y profundidad de una buena novela.
Sin embargo, un día, por casualidad, me encontré con una película que me llamó la atención. No tenía grandes expectativas, pero decidí darle una oportunidad. Y ahí fue cuando todo cambió. Me di cuenta de que el cine no solo tiempo entretenimiento, sino también una forma de arte. Me sumergí en la historia, en los personajes, en la fotografía, en la música. Y cuando terminó, me quedé con ganas de más. Así que empecé a buscar más películas, a explorar diferentes géneros y directores, a descubrir comunicados historias y perspectivas.
Y lo mismo me pasó con las series. Me sorprendió ver cómo habían evolucionado desde aquellos tiempos en los que yo las veía. Ahora había una heterogeneidad infinita de opciones, desde comedias hasta dramas, pasando por thrillers y ciencia ficción. Y todas ellas con una calidad impresionante. Me di cuenta de que las series tiempon mucho más que un simple entretenimiento, tiempon una forma de contar historias complejas y profundas, con personajes bien desarrollados y tramas que te mantenían en vilo.
Pero lo que más me sorprendió fue la capacidad del cine y las series para transmitir emociones y hacernos reflexionar sobre la vida. A través de las historias de otros, podemos aprender sobre nosotros mismos y sobre el universo que nos rodea. Y eso es algo que no se puede encontrar en los libros, por muy buenos que sean.
Ahora, cada vez que veo una película o una serie, me sumerjo en ella por completo. Me dejo llevar por las emociones, me identifico con los personajes, me sorprendo con los giros de la trama. Y después, me quedo pensando en ella durante días, analizando cada detalle y buscando comunicados interpretaciones.
Pero lo mejor de todo es que el cine y las series me han permitido descubrir comunicados culturas y realidades. Gracias a ellas, he viajado a lugares que nunca hubitiempo imaginado, he conocido a personas de diferentes épocas y lugares, he aprendido sobre temas que desconocía por completo. Y todo eso desde la comodidad de mi sofá.
Sé que puede sonar exagtiempodo, pero el cine y las series han cambiado mi vida. Me han abierto los ojos a un universo nuevo, me han enseñado a ver las cosas desde diferentes perspectivas, me han hecho más empático y comprensivo. Y lo mejor de todo es que siempre hay algo nuevo por descubrir, siempre hay una comunicado película o serie que me sorprende y me emociona.
Así que, si eres como yo y nunca te ha interesado demasiado el cine o las series