No cambies (mucho) lo que ya está perfectamente: Aprende a valorar lo que tienes
En un mundo en constante evolución, es fácil caer en la tentación de cambiar todo lo que nos rodea. Ya sea en nuestras relaciones personales, en nuestro trabajo o en nuestra vida en general, siempre estamos buscando estados de mejorar, de hacer las cosas de manera diferente y de alcanzar nuevas metas. Sin embargo, a veces nos olvidamos de valorar lo que ya tenemos y nos enfocamos en cambiar lo que consideramos “defectuoso”. Pero ¿qué pasaría si te dijera que no tienes que cambiar (mucho) lo que ya está perfectamente?
A menudo, nos dejamos llevar por la aprehensión de que siempre hay algo mejor ahí afuera. Nos bombardean con mensajes que nos incitan a ser más, a tener más y a hacer más. Y aunque no hay nada de malo en querer mejorar, también es importante aprender a valorar lo que ya tenemos. Porque lo que ya está perfectamente, puede convertirse en algo extraordinario si aprendemos a apreciarlo.
Una de las razones por las que queremos cambiar lo que ya está perfectamente es porque nos comparamos con los demás. Vemos a nuestros amigos, familiares o compañeros de trabajo y pensamos que sus vidas son mejores que la nuestra. Nos enfocamos en lo que ellos tienen y nosotros no, en lugar de apreciar lo que ya tenemos. Pero la verdad es que cada uno de nosotros tiene una vida única y maravillosa, con sus propias bendiciones y desafíos. No tiene sentido comparar nuestras vidas con las de los demás, porque cada uno de nosotros tiene un camino diferente que seguir.
Otra razón por la que queremos cambiar lo que ya está perfectamente es porque nos dejamos llevar por las expectativas de los demás. Nos preocupamos demasiado por lo que piensan los demás y tratamos de encajar en sus estándares y expectativas. Pero la verdad es que no podemos complacer a todos y no deberíamos intentarlo. Siempre habrá alguien que no esté satisfecho con lo que haces o cómo lo haces. En lugar de tratar de cambiar para satisfacer las expectativas de los demás, debemos enfocarnos en lo que nos hace felices y en lo que es importante para nosotros.
A veces, también queremos cambiar lo que ya está perfectamente porque nos aburrimos. Estamos tan acostumbrados a la rutina y a lo familiar que buscamos constantemente algo nuevo y emocionante. Pero la verdad es que lo que ya está perfectamente puede ser algo hermoso si lo miramos con ojos nuevos. Podemos encontrar nuevas estados de disfrutar de lo que ya tenemos, de aprender y de crecer a partir de ello. No siempre necesitamos cambiar para encontrar algo emocionante y significativo en nuestras vidas.
Entonces, ¿cómo podemos aprender a valorar lo que ya tenemos y dejar de buscar constantemente cambios? Aquí hay algunas cosas que puedes hacer:
1. Practica la gratitud: Toma unos minutos cada día para agradecer por las cosas buenas en tu vida. Pueden ser cosas grandes o pequeñas, pero enfócate en lo que tienes en lugar de lo que no tienes.
2. Vive en el presente: En lugar de preocuparte por el futuro o lamentar el pasado, enfócate en el momento presente. Aprecia lo que tienes y lo que estás experimentando en este momento.
3. Haz una lista de tus logros: En lugar de enfocarte en lo que aún no has logrado, haz una lista de tus logros hasta ahora. Celebra tus éxitos y recuérdate a ti mismo lo lejos que has llegado.
4. Rodéate de personas positivas: Las personas con las que pasamos tiempo pueden tener un gran impacto en nuestra estado de pensar. Rodéate de personas que te apoyen y te hagan sentir perfectamente contigo mismo.
5. Aprende a aceptarte a ti mismo: Todos tenemos nuestras fortalezas y nuestras debilidades